ANOTHER DAY,

Its been a while since we wrote, but work has been hectic! We wanted to thank you all who kept us in prayer. We went to Ceiba and came back well. Though a little bit tired and a little bit muddier!!!

We went to Ceiba to celebrate a memorial service with the family of a young girl named Rebeca. She participated in the first youth camp and wanted to study and to serve the Lord. Yet, poverty pushed her to migrate and work in Cancun as a maid. There she was hit by a motorcycle and died. Being with her family while remembering Rebeca’s dreams and sharing the night at Pastor Pedro’s house was a deep and fulfilling experience.

This is the rainy season and it has been raining a lot! In the mountain villages we have mudslides, rivers flooding over bridges and disappearing roads! We got stuck in our way up and on our way down! And we were rescued by brothers and unknown people that just gave us a hand when we needed it. When almost reaching the paved road, we waited for 4 and a half hours for the dirt road to be more or less passable. The road just disappeared with the rains!

This made me think that sometimes we have to get stuck to appreciate the road and the experiences that come with it. When you get stuck, keep the hope and the faith. God will send someone who will give a hand to get you out. But remember though that when times come, it will be your turn to give a hand. "Share, give yourself, and serve." Matthew 10:7-8

Blessings!

 

OTRO DÍA,

Ya llevamos un tiempo sin saludarles, pero el trabajo nos tiene bien agitados. Pero, queríamos darles las gracias a todos los que nos han mantenido en oración. ¡Fuimos a Ceiba y volvimos bien; un poco cansados y un poco más enlodados!

En Ceiba celebramos un memorial junto a la familia de una joven llamada Rebeca. Rebeca participó en el 1er campamento de la juventud y quería estudiar y servir al Señor. Sin embargo, la pobreza la empujó a emigrar y a trabajar en Cancún como doméstica. Allí fue golpeada por una motocicleta y murió. El estar con su familia, mientras recordábamos los sueños de Rebeca y compartir la noche en la casa del pastor Pedro fue una profunda y satisfactoria experiencia.

¡Esta es la temporada de lluvias y ha llovido mucho! En las aldeas y pueblos de la montaña tenemos deslaves, inundaciones de ríos que se llevan los puentes y caminos que desaparecen. ¡Nos quedamos atascados en la subida y en la bajada! Gracias a Dios fuimos rescatados por los hermanos y gente desconocida que  nos dieron una mano cuando lo necesitábamos. Luego, casi llegando a la carretera asfaltada, esperamos durante 4 horas y media una reparación que hizo el camino más o menos pasable. ¡El camino había desaparecido con las lluvias!

Todo esto me hizo pensar que a veces podemos quedarnos atascados para poder apreciar el camino andado y las experiencias que vienen con él. Cuando estés atorado/a, mantén la esperanza y la fe. Dios enviará a alguien que te dará la mano para salir del atolladero. Pero recuerda sin embargo, que cuando llegue el tiempo, será tu turno de dar la mano. "Comparte, entrégate y sirve." Mateo 10:7-8

Bendiciones,